“El Ferrari más divertido de conducir”. Así define Ferrari a su nuevo 296 GTB, el modelo más deportivo de la legendaria casa, pero que tiene la peculiaridad de recoger una mecánica V6 híbrida enchufable, en lugar de las habituales V8 y V12 del fabricante italiano. Cabe resaltar, que es, de hecho, el primer Ferrari V6 de la era moderna.

Podría parecer que es el nuevo modelo de acceso de la marca, pero no lo es, porque a pesar de su motor más menudo llega a 830 CV de potencia. Y tampoco es el menos caro, porque en España rondará los 300.000 euros, por delante de los Roma y Portofino, y muy cerca del F8 Tributo. Además, gracias a la mecánica V6 y también a su tracción trasera, resulta más ligero y puro de conducir, y la afirmación de la empresa parece cobrar sentido.

El Ferrari 296 GTB es un cupé biplaza de motor central que mide 4,5 metros de largo y estrena la segunda mecánica híbrida enchufable de Ferrari, tras la de su hermano mayor el SF90 Stradale, que llega a 1.000 CV y tiene tracción 4×4.

Va acoplada a un cambio automático de doble embrague y ocho marchas, y toda la fuerza se envía a las ruedas traseras, gestionadas a su vez por un diferencial autoblocante con gestión electrónica de última generación.

Las primeras unidades se entregarán en el primer trimestre de 2022 y, aparte del 296 GTB, se ofrecerá también una variante Assetto Fiorano, enfocada a un uso más intensivo en circuito, que subirá a unos 340.000 euros.

El nombre 296 GTB proviene de la cilindrada del motor (2.992cc), el número de cilindros (6) y el acrónimo Gran Turismo Berlinetta, una denominación histórica del fabricante.

El motor 3.0 V6 biturbo rinde 663 CV, y el bloque eléctrico de apoyo, otros 167 CV, y en conjunto logran alcanzar los 830 CV de potencia, que llegan a 8.000 revoluciones. El par máximo asciende a 740 Nm a 6.250 vueltas. Y según Marc Gené, probador y embajador de la marca, que ha oficiado de moderador en la presentación online del coche, “llama la atención por su aceleración y también por el sonido, especialmente a altas revoluciones”.

El diseño prescinde de alerones y apéndices y recuerda al de modelos anteriores como los 360 Módena y F430, aunque con rasgos más modernos y un frontal similar al del actual SF90. Pero la aerodinámica está muy trabajada y, entre otros detalles, el alerón trasero va oculto hasta que se despliega, enrasado en la carrocería, y el conjunto puede generar 360 kilos de apoyo o fuerza descendente (pega el coche al suelo) a 250 km/h.

El interior biplaza, por su parte, recoge el mismo estilo del SF90 Stradale, que estrenó el cuadro de mandos más moderno de Ferrari, con nuevo volante, pantallas y menús, y una apariencia general deportiva, limpia y cuidada.

La batería tiene 7,45 kWh y permite dedicar los 167 CV que alimenta a circular en modo eléctrico hasta 25 kilómetros, conseguir gastos razonables en las distancias cortas o sumarlos a los del motor V6 para desplegar un poder demoledor.