Identificar la mejor opción y realizar su correcta instalación, darán la pauta para un viaje seguro y garantice la seguridad de los pequeños.

Debemos tener en cuanta que los fabricantes clasifican sus sillas en base al peso del infante, y no tanto por su edad.

Asientos para recién nacidos: Para bebés de hasta 20 libras de peso (10 kg). Estos deben instalarse siguiendo las recomendaciones del fabricante y siempre viendo hacia atras.

Asientos convertibles: Estos pueden ser usados viendo hacia atrás o hacia el frente, dependiendo del peso y/o edad del niño.  Por lo regular se emplean a partir de un año o cuando haya alcanzado 20 libras (10 kilos) de peso y su límite es de 40 libras (18 kilos).

La mayoría de fabricantes recomiendan mantener la “posición invertida” hasta que el niño cumpla por lo menos dos años (recuerda guiarte por las recomendaciones de peso del fabricante y leyes vigentes).

Usa la silla hacia adelante solo cuando el pequeño alcance el peso/edad recomendada por el fabricante y recuerda siempre instalarla en el asiento trasero (salvo excepciones especiales).

Asientos para niños: Usados a partir de los las 40 libras (18 kilos), o aproximadamente cuatro años de edad. Su uso es recomendable hasta los ocho años de edad u 80 libras de peso (36 kilos).

El peso y altura de tu niño siempre serán factores determinantes para cada tipo de silla.

Booster: Es un cojín que eleva al infante de modo que el cinturón puede ajustárse correctamente a su cuerpo. Se recomienda su uso en promedio entre los ocho y doce años de edad (estimado) o entre 80 y 100 libras (36 y 45 kg). El uso del booster debe ser siempre en el asiento trasero.

Los cinturones de seguridad de los autos sujetan correctamente a personas a partir de 4’ 9” (145 cm) de estatura. Si sujetas al niño antes de haber alcanzado dicha estatura aumenta el riesgo de lesiones graves a la columna vertebral y órganos internos en caso de impacto.

Instalación correcta de las sillas.

Los vehículos ensamblados en Estados Unidos a partir del año 2002, incluyen sistemas de anclajes inferiores y correas de sujeción infantil (LATCH, por sus siglas en inglés). Este consiste en pares de barras pequeñas llamadas anclas, localizadas donde se unen los cojines en el asiento trasero. Además, existe un ancla adicional ubicada detrás del cojín vertical (respaldo) que se utilizará solo con las sillas que miran hacia el frente del vehículo.

Las bases, asientos de seguridad para bebé y sillas diseñados para sistema LATCH tienen unos ganchos que se deben sujetar a estas anclas. Esto fija la silla en posición y retiene al niño en caso de impacto.

¿Por qué colocar la silla mirando hacia atrás?

Las fuerzas generadas por un choque frontal son enormes. Si la silla está colocada viendo hacia el frente, provocaría grandes tensiones en el cuello, columna vertebral y órganos internos del niño (frágiles cuando son pequeños). Para reducir el riesgo de lesiones graves, la silla debe ir en el asiento trasero y mirando hacia atrás del auto hasta que el niño tenga mínimo dos años o cierto peso (según las recomendaciones del fabricante de la silla).

Para instalar una silla para recién nacidos mirando hacia atrás:

– Lee las instrucciones de la silla/producto que compraste y también el manual del usuario de tu auto en el apartado de seguridad.
– Identifica las barras de metal del sistema LATCH (anclas) en la parte inferior del asiento trasero.
– Ubica la base del asiento del niño en posición y sujeta los ganchos de la base de seguridad en las anclas.
– Empuja firmemente la base hacia abajo y ajusta las correas.
– Si tienes una base de asiento que se ajusta por medio del cinturón de seguridad, verás que tiene ranuras diseñadas para pasar el cinturón hasta llegar al broche, donde la asegurarás. Asegurate que el cinturón no esté torcido.
– Una vez instalada verifica la base del asiento de seguridad se encuentre bien asegurada y fija. No debe moverse más de una pulgada (2 cm) de lado a lado ni de adelante hacia atrás.
– Una vez fija, colocar el asiento del bebé sobre ella.
– El asiento debe quedar en el ángulo de inclinación correcto; para confirmarlo, guiate por los indicadores en la misma silla.

Pasos para instalar un asiento convertible mirando hacia atrás:
– Es el mismo proceso, sólo que aquí no tendrás que colocar una base de asiento, sino directamente enganchar las correas inferiores de la silla convertible en los anclajes ubicados en la zona baja del respaldo del asiento trasero.
– La silla no debe moverse más de una pulgada (2 cm) de lado a lado ni de adelante hacia atrás y debe ser colocada en el ángulo de inclinación correcto (guíate por los indicadores en la silla).
– Si vas a asegurar el asiento convertible por medio del cinturón de seguridad y no por el sistema de anclaje, deberás entre pasar el cinturón por la zona inferior del asiento y asegurarlo en el broche. El cinturón debe de estar sin torceduras y con la máxima tensión posible.

Pasos para instalar un asiento convertible mirando hacia adelante:
– Es virtualmente el mismo proceso que en el sentido inverso.
– Si aseguras el asiento mediante el sistema LATCH (anclas) deberás que conectar los ganchos con las anclas, asegurar correas, fijar bien el asiento y comprobar el ángulo de inclinación correcto.

Llevar al bebé en el asiento delantero.

Esto se encuentra permitido cuando los niños requieren atención especial. Para ello, debes desactivar la bolsa de aire del pasajero y la silla debe ser instalada mirando hacia atrás.

Cualquiera de las sillas que utilices debes de sujetar muy bien al pequeño con el arnés que trae el asiento integrado, los cordones deben estar firmes y los broches bien ubicados. Siempre consulta el manual e instrucciones del producto.

En los Estados Unidos no hay una reglamentación única sobre sillas infantiles. Cada estado tiene su propia normativa, pero en general son muy similares y en todos los casos es obligatorio que bebés y niños sean transportados en sillas especiales. En algunos estados los bebés menores de un año (o hasta 20 libras de peso) deben viajar con el asiento instalado viendo hacia atrás, y en otros el mismo requerimiento se expande hasta los dos años de edad.