A través de la historia del automóvil, algunos se adelantaron de alguna u otra forma a su tiempo.
Benz Motorwagen 1896.
El primer auto de la historia. El inventor Karl Benz creó este triciclo motorizado en el que su esposa e hijos emprendieron el primer viaje en auto de toda la historia. La gran novedad de éste auto es que no necesitaba caballos para moverse, sino que utilizaba un pequeño motor de un cilindro con 462cc que producía 1.1 caballos de vapor que usaba ligorin como combustible. La movilidad del ser humano ya no sería la misma, ya que desde entonces el auto se convertiría en una pieza esencial para el progreso.
Semper Vivus Lohner-Porsche 1900.
La idea de un auto impulsado por dos diferentes fuentes de energía –auto híbrido- no es tan reciente como se podría pensar, de hecho es casi tan antiguo como el mismo automóvil. Ferdinand Alexander Porsche en conjunto con el empresario Jacob Lohner entregaron en 1899 la patente para un carruaje impulsado por dos motores –uno a gasolina y dos eléctricos colocados en las ruedas delanteras. Así, en 1900 nació el primer auto híbrido de la historia. Desgraciadamente la tecnología no se continuó desarrollando por la dificultad que representaban las baterías, problema que aún en la actualidad no se ha terminado de superar.
Ford Modelo T.
El Ford T fue producido entre 1908 y 1927 y fue el primer auto accesible de la historia. Si bien el Benz Motorwagen inició la historia del automóvil, el Modelo T revolucionó la forma en la que se fabricaban los autos con la línea de producción que inventó Henry Ford, facilitando su fabricación y haciendo el proceso más económico. Gracias a este sistema, salieron de la planta de Ford en Michigan más de 15 millones de modelos T que ayudaron a movilizar a la clase media de EU. El invento fue tan revolucionario que hoy en día todos los autos son producidos de esta forma, modernizándose con el tiempo.
Cadillac Type 53 1916.
Además de incorporar el novedoso sistema de encendido eléctrico del Cadillac 1912 Type 53 de 1916 es el primer auto con los controles como los conocemos ahora. Antes de este auto, cada uno contaba con un sistema diferente para operarlos con muchas palancas, pedales y demás complicaciones que el usuario debía aprender a mover con cada auto. El Cadillac 1916, empleaba un volante, tres pedales en el piso: clutch, freno y acelerador en orden de izquierda a derecha, una palanca de velocidades en medio de los asientos delanteros y el freno de mano.
Citroën Traction Avant.
Aunque muchas personas piensan que éste fue el primer auto de tracción delantera, en realidad no lo es, pero la construcción monocasco y el hecho de utilizar las ruedas delanteras para moverse ayudaron a que fuera el vehículo de tracción delantera más popular de su tiempo. Mientras que los demás autos en esa época (1934-1957) se construían sobre un marco de acero, el Traction Avant conformaba el “chasís” y la carrocería en una sola pieza, logrando una mejor rigidez estructural, un menor peso y más espacio en la cabina. Se produjeron 759,111 unidades de este auto francés que llevó al siguiente nivel la forma de fabricar automóviles.
Citroën DS.
El DS fue producido por el fabricante Citroën entre los años 1955 y 1975, siendo el sucesor del Traction Avant, y al igual que éste, el DS aportó grandes tecnologías a los autos. Primero estaba el sistema hidroneumático de la suspensión que no sólo absorbía las irregularidades del terreno como ninguno otro, sino que también ajustaba la altura y le permitía circular sin una rueda trasera. Después, el sistema de frenos de disco, que aunque no fue el primero en utilizarlo, sí fue el que lo popularizó. El problema que tenía era la complejidad de estos sistemas -la suspensión era delicada y los frenos disco estaban pegados a la transmisión lo que complicaba su mantenimiento.
Volvo Amazon.
El Volvo Amazon es un auto producido entre 1956 y 1970 que se ofrecía como sedán de dos puertas, sedán de cuatro y vagoneta. La gran aportación de este auto fue la introducción en serie de los cinturones de seguridad de tres puntos, marcando el inicio de la preocupación por la seguridad de los ocupantes de un automóvil en un choque. Hoy en día esta preocupación ha alcanzado niveles que en los años 50 eran impensables y ha transformado desde el diseño exterior hasta el desarrollo de nuevas tecnologías de seguridad pasiva y activa.
Austin-Morris Mini.
En una época donde los “autos burbuja” invadían Europa con dimensiones pequeñas y motores de motocicleta, British Motor Corporation (BMC) decidió en 1959 crear un auto que revolucionaría por completo la forma de construir automóviles, tanto así que hoy en día la mayoría de los autos se construyen de esta forma. Se trata ni más ni menos del primer auto con motor transversal delantero, lo que significa que el motor y transmisión están colocados a lo ancho del auto y no a lo largo. Gracias a esto, el Mini presumía que el 80% del largo total del auto era espacio para los ocupantes.
Oldsmobile F85 Turbo Jetfire 1962.
La primera vez que un turbo llegó al motor de un auto de producción fue en 1962 de la mano de Oldsmobile. Antes de esto, los turbos sólo se utilizaban en la aviación para mantener una misma presión atmosférica. Fue entonces que la compañía vio la oportunidad de exprimir más potencia del motor V8, e iniciaría años más adelante, todo un furor por nombrar Turbo a todo en los ’80. Hoy en día se utilizan en motores pequeños para mantener el consumo de combustible y emisiones de CO2 lo más bajo posibles sin escatimar en potencia, se ha convertido en un aditamento tan importante que poco a poco desaparecerán los motores naturalmente aspirados.
Mercedes-Benz Clase S 1991.
De acuerdo a la NHTSA (National Highway Traffic Safety Administration), el invento más importante en tema de seguridad después del cinturón de seguridad de tres puntos, es el Control de Estabilidad, sorprendentemente antes que la bolsa de aire (vista por primera vez en el Clase S de 1979). El primero en introducirlo a un auto de producción fue Mercedes-Benz en su modelo insignia, el Clase S de 1991. Fue desarrollado a partir del sistema de ABS y ayuda a que el auto se mantenga en una misma dirección. Hoy en día, prácticamente todo auto moderno cuenta con este sistema.
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