Al momento en que decides comprar un vehículo usado debes prestar mucha atención a cada detalle y evaluarlo bien, ya que hay muchos estafadores que podrían estar vendiéndote un carro lleno de mañas.
Hay 10 defectos puntuales que una vez te percates de ellos deberías frenar la compra porque son fallos que podrían salirte muy caros.
El vehículo debe tener todos sus papeles al día, antes de tomar una decisión debes analizar de manera minuciosa que cada documente este correcto y completo. Asimismo, comprobar que tanto el número de matrícula como el titular del carro son los mismos en toda la documentación.
Debe coincidir la referencia del chasis que sale en los papeles y la que aparece físicamente grabada en el vehículo. En caso contrario, puede que el automóvil sea robado. La zona del vehículo donde salga el número de chasis tampoco debe presentar alteraciones o repintados.
Si es negro, indica una mala combustión del motor, si la tonalidad es azulada, es que se está quemando aceite y, si es blanco, significa que el líquido refrigerante está entrando en los cilindros. Puede ser un problema menor (en los dos primeros supuestos) o muy grave (el tercero), pero no sería recomendable que asumas ese riesgo.
Este no es un caso muy común, pero igual presta atención a cada detalle de la carrocería, sobre todo al suelo (del habitáculo y el maletero), la parte interior de los pasos de ruedas, las uniones del techo con la carrocería y los marcos de las ventanillas.
El óxido suele aparecer en modelos muy antiguos (anteriores a la década de los años noventa) o que hayan circulado toda su vida en entornos costeros o de alta humedad.
La presencia de aceite, líquido refrigerante o hidráulico, o carburante en el suelo bajo el vehículo es otro motivo de huida. Puede ser una pequeña fuga fácil de reparar o, todo lo contrario, así que continúa buscando que ese no es el tuyo.
Alertan de que el vehículo no pisa bien, porque la suspensión está desalineada o algunos de sus componentes (tacos de goma, rótulas…) en mal estado. También puede indicar defectos estructurales de mayor gravedad, como un accidente mal reparado, por ejemplo.
Se gira la llave, o se aprieta el botón de arranque y debe ponerse en marcha de inmediato, como máximo en dos segundos. De no hacerlo, esto suele ser signo de un motor de arranque en mal estado, fallos en los componentes del sistema de alimentación (bomba de combustible, inyectores…) o una larga lista de posibles problemas eléctricos.
Si l vehículo arranca y no se le escuchan ruidos es un buen indicio, seguido a esto queda chequear el estado del embrague y hay una sencilla maniobra para comprobarlo, al menos en carros con cambio manual. En terreno llano, y con el vehículo encendido, se mete la marcha más larga que tenga (quinta, sexta…) y se suelta el pedal de golpe. El vehículo debe pararse al instante, si no, el embrague empieza a patinar, y su sustitución es cara.
El cambio es otro de los componentes que exigen reparaciones especialmente caras y que suelen alargarse en el tiempo. Por eso, al menor síntoma de mal funcionamiento, mejor no seguir. La palanca no debe tener holguras y las marchas deben insertarse con facilidad. Tampoco deben salirse una vez insertadas ni rascar al reducir.
Resulta complicado evaluar, sin disponer de herramientas especializadas (como las de un taller), el estado de un motor. Pero si suena bien, no presenta fugas de líquido ni echa humos por el escape, será un buen comienzo. Asimismo, y superada esa primera fase, hay una prueba que sigue dando pistas, porque permite hacerse una idea de su compresión y calidad de giro en general. Se inserta una marcha larga, se dejan caer las revoluciones casi hasta el ralentí y se acelera a fondo: el coche debe ir ganando velocidad y vueltas con progresividad, sin vibrar ni dar tirones. Puede que tarde mucho o poco, según su potencia, pero más que el tiempo, hay que fijarse en que la respuesta sea continua y homogénea. Para conocer más sobre las vibraciones en un vehículo puedes acceder a nuestro artículo sobre Causas de las vibraciones en el volante.
Luego de evaluar los pasos anteriores, al menos uno de ellos se presenta lo recomendable es que continúes buscando otras opciones de vehículos para que no vayas a caer en una estafa.