Con un despliegue de tecnología, arte y seguridad estricta fueron transportados los restos de los más antiguos gobernantes egipcios hacia su nueva morada, el Museo Nacional de la Civilización Egipcia.
Este evento fue denominado ‘‘Desfile Dorado de los Faraones” y conllevó un recorrido de 5KM en el que transportaron 22 momias (18 reyes y 4 reinas).
Un evento de tal envergadura, en el que lo más importante, luego de las momias, son los vehículos donde transportarlas, contó con un convoy decorado y con amortiguadores especiales, seguido por una caravana que incluía réplicas de carros de guerra tirados por caballos.
Las momias fueron colocadas a bordo de cámaras especiales llenas de nitrógeno para protegerlas de las condiciones externas y evitar cualquier impacto en ellas.
Este recorrido supuso un reto para las autoridades egipcias, debido a la delicadeza y seguridad que significó movilizar este tesoro nacional sin presentar ningún error, por tal motivo eligieron los vehículos militares más seguros.